Llega el frío y el invierno y con ellos nuestra manía o costumbre de taparnos bien la garganta, sobre todo si tenemos hijos, de cubrírsela a ellos, para no enfriarla y que no duela. Pero estamos equivocados porque realmente esto no sirve de nada más que para pasar menos frío, no nos protege la garganta en sí, ni evita estos problemas. Aparte, otro aspecto a tener en cuenta sobre la garganta y el frío es que en esta época del año es frecuente lo que comúnmente llamamos ‘afonía’, cuando realmente queremos hablar de ‘disfonia’. “La ‘afonia’ es la pérdida completa de la voz, mientras que la ‘disfo…